LÍNEA POLÍTICA
TABASCO: VAMOS DE MAL EN PEOR
Alberto Peregrino
Las exigencias no cesan, sino al contrario, realmente en Tabasco vamos de mal en peor, cuando vemos por doquier plantones y marchas en reclamos de los incumplimientos que ha hecho el gobierno federal de López Obrador y el estatal encabezado por Carlos Manuel Merino Campos.
Hago mención de forma directa en el caso de la Secretaría del Bienestar en nuestro estado, que a la fecha no ha podido cerrar los reclamos que por falta de los pagos de los diez mil pesos y la entrega del apoyo de los enseres domésticos prometidos por el gobierno federal sigue teniendo. Hasta la fecha ni una ni otra cosa ha sucedido.
En mi entrega del jueves pasado, comentaba que fue el mismo Delegado Estatal de Programas de Desarrollo, de la Secretaría del Bienestar en Tabasco, Daniel Casasús Ruiz, quien personalmente acudió a dar atención al primer grupo de manifestantes en Palacio de Gobierno, pero que la respuesta simplemente sigue siendo negativa.
Ese día solo se concretó a pedir a los ahí presentes que se trasladaran a la dependencia federal para que les dieran respuesta y no, nada pasó, pues fui testigo presencial de cómo las personas solo fueron atendidas por el vigilante de la puerta de acceso, quien amablemente se concretó a pedir copias de los vales y de la credencial expedida por el INE, más un número telefónico.
La idea era que se les diera una respuesta concreta, pero repito, eso jamás pasó porque simplemente no les interesa y no hay ganas ni voluntad de finiquitar ese terrible problema en que se han visto envuelto desde un principio, y el hoy director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo, Javier May Rodríguez, es testigo de ello porque fue él quien encabezó los programas cuando estuvo al frente de la Secretaría del Bienestar.
Un día después, el viernes concretamente de la misma semana pasada, al no tener respuestas concretas, nuevamente un grupo de pobladores de Oxolotán del municipio de Tacotalpa que resultaron seriamente afectados por las inundaciones pasadas, volvieron a manifestarse en Palacio de Gobierno, exigiendo lo mismo, que se les paguen los diez mil pesos y que se les entreguen sus enseres domésticos.
Ahí con justa rezón denunciaron que a pesar del ofrecimiento de Daniel Casasús que serían atendidos en esa dependencia, simplemente nadie los ha atendido y mucho menos nadie les ha dado respuesta a su petición, sin embargo, dejaron clara su molestia porque ya están cansados que los sigan engañando y que les den tantas vueltas, toda vez que ya van más de dos años y no han sido atendidos y mucho menos resuelto su problema.
Y es que, en algunos casos, los ‘servidores de la nación’ que llevaron a cabo el censo casa por casa, equivocadamente colocaron a un sinnúmero de personas en el programa sembrando vida sin pertenecer a él, y como dentro de ese programa les dieron apoyos, ahora dicen que no se puede repetir dos veces, pero la verdad es que realmente ellos no están en ‘Sembrando Vida’. Total que esto se ha vuelto un cuento de nunca acabar.
Línea de entrada
La manifestación de más de cien policías el pasado fin de semana, frente al Palacio de Gobierno y del H. Congreso del Estado, no es sino una muestra más que las cosas no están funcionando bien en Tabasco. La exigencia de esas personas cuidadoras del orden público, lo dice todo, pues desde que dio inicio el actual gobierno morenista, ellos entregaron sus demandas para tener un trato mejor de sus altos mandos, pero también para procurar mejores prestaciones salariales conforme la ley, sin embargo, nada eso ha ocurrido ni creo que ocurra porque simplemente no hay capacidad ni voluntad de querer hacer las cosas bien. Tanto que se llenaron la boca de hacer las cosas diferentes, aunque, a decir verdad, sí son diferentes, porque su actuar es peor que los gobiernos anteriores, incluyendo el de Arturo Núñez que, dicho sea de paso, dejó a Tabasco en condiciones deplorables y sigue gozando de impunidad.
Línea de salida
Definitivamente la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) de Román Meyer se está ‘orinando fuera del vacín’ pues con el afán de quedar bien construyen obras como las del parque Centenario 27 de Febrero, el mercado público de Cunduacán o el Malecón de la Villa Tepetitán, tierra del Presidente, Andrés Manuel López Obrador. En ésta última se invirtieron 100 millones 252 mil pesos, pero utilizaron material de pésima calidad. Simplemente están convertidas en castillos de arena porque fueron obras hechas al vapor y ya hoy presentan serios problemas. Lo mismo sucedió en Jalpa de Méndez, donde personal de protección civil acordonaron el área en el poblado Iquinuapa por el derrumbe también del malecón donde se invirtieron más de 4 millones y hoy ya se desplomó en su estructura. Es decir, las obras de Jesús Selván se caen a pedazos. Y la pregunta es: ¿Quién alzará la mano para responder por ellas? Por hoy es todo, nos leemos en la próxima Dios mediante.
