LA ESPERANZA DE LA ALIANZA

LÍNEA POLÍTICA

Alberto Peregrino

Los partidos de oposición, PAN, PRI y PRD, anunciaron la semana pasada que ya reestablecieron relaciones y regresa la idea de una gran alianza, en principio para las elecciones de 2023, eso sí, con la mira bien puesta en la elección de 2024.

Y es que según también aseguraron, tendrán candidatos comunes para las gubernaturas del Estado de México y Coahuila y, si no hay problemas de traiciones entre uno y otro partido, también habrá un candidato de la Alianza a la Presidencia de la República en 2024. Por eso le digo que tienen la mirada bien puesta para esa fecha.

Y usted se preguntará: ¿Qué tienen en común estos tres partidos? Siendo optimistas fueron estos institutos los que en un gran acuerdo crearon el sistema democrático allá por el año 1996, y del otro lado de la moneda también son los que con el Pacto por México el sexenio pasado terminaron desdibujados del mapa político y hermanados en la corrupción que no era exclusiva, aunque sí un signo de identidad, del gobierno de Enrique Peña Nieto.

Usted estará de acuerdo con este servidor, que hoy los partidos llamados tradicionales representan dos cosas: el pasado corrupto y el antilopezobradorismo, sin embargo, el voto duro de la alianza ‘Va por México’ es, pues, directamente proporcional al rechazo del presidente, pero en las encuestas suben y bajan de acuerdo a la aceptación o rechazo a López Obrador.

Más allá de eso no tienen ni discurso, ni proyecto de país, ni candidato. A quien pongan en la boleta, así sea una escoba, tiene asegurado el voto de rechazo al presidente. Siempre se dice que el problema para Morena en el 2024 es que López Obrador no estará en la boleta. Ese problema es exactamente el mismo para la oposición, pues las figuras visibles no tienen un proyecto de país que no sea “salvar a México de la destrucción lopezobradorista”.

De Usted por un hecho, que sin López Obrador en la boleta les costará mucho trabajo sostener ese discurso y demostrar que ellos son algo más que “la menos peor de las opciones”.

Mientras tanto, la Alianza que parecía muerta tras la traición del PRI en la votación sobre la Guardia Nacional revivió gracias a los problemas internos de Morena. Por citar uno de los ejemplos más claros, la amañada elección del candidato Armando Guadiana en Coahuila provocó la ruptura del partido en el gobierno, y eso está a la vista de todos.

Derrotado por el dedo del presidente, que decide las encuestas a su antojo, Ricardo Mejía Berdeja anunció que busca la candidatura por otro partido, lo que aumenta considerablemente la posibilidad de la Alianza de mantener al menos uno de los dos estados en disputa en 2023. El olor a sangre les abrió el apetito.

La soberbia es el común denominador de los poderosos, eso lo sabemos todos, y contrario a lo que creen sus fans, el presidente también se equivoca y en los últimos meses de gobierno lo hará más seguido, de manera más evidente y con consecuencias más profundas. De ahí que la Alianza fincará sus esperanzas para seguir viviendo en la línea política.

Línea de entrada
Y como si tuvieran la fuerza que algún día existió en ellos, todavía el PRI sigue estirando la liga la cual está a punto de reventar, tanto que los senadores regenteados por Miguel Ángel Osorio Chong el martes tuvieron que cancelar la reunión plenaria donde se discutirían importantes temas. Todo por la presencia inesperada del dirigente nacional de ese partido Alejandro Moreno Cárdenas, quien supuestamente hizo acto de presencia sin haber sido invitado de manera formal, sin embargo, todo eso pone más que evidente la discordia que existe en el interior de ese partido.

Línea de salida
Por su presunta participación en un ilícito cometido contra la Secretaría de Salud en el malogrado gobierno del perredista Arturo Núñez Jiménez, la Fiscalía General del Estado (FGE) también el martes pasado detuvo a Juan “N”, ex director administrativo de esa dependencia, quien desde el 2020 estaba prófugo de la justicia por haber sido responsable de realizar una supuesta transferencia indebida de más de 74 millones de pesos, recursos que estaban destinados al proyecto de Fortalecimiento a la red hospitalaria para la prestación de los servicios de salud del estado de Tabasco. ¿Y Núñez cuándo? Por hoy es todo, nos leemos en la próxima Dios mediante.