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¡Mala idea! Captan a turista asando bombones en lava de volcán en Islandia

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Cada que un volcán entra en erupción en el país, los turistas aprovechan para acercarse a la zona de los ríos de lava para poder captar imágenes fascinantes de este fenómeno natural

El miércoles 3 de agosto, el volcán Fagradalsfjall entró en erupción en la península islandesa de Reykjanes, a unos 40 kilómetros al oeste de Reikiavik, informó la Oficina Meteorológica de Islandia.

Ante esto (situación normal en el país) muchos habitantes se han desplazado hasta sitio para contemplar una buena imagen de la lava hirviendo, que tras salir del volcán se convierte en roca oscura a medida que este se enfría y libera un humo azulado.

Como te comentamos, esta es una actividad usual en Islandia, debido a que este es un territorio que cuenta con 130 volcanes activos e inactivos, los cuales están bajo la isla, repartidos por todo el país, excepto en los Fiordos del Oeste; actualmente existen unos 30 sistemas volcánicos activos.

Cada que un volcán entra en erupción, los turistas aprovechan para acercarse a la zona de los ríos de lava para poder captar imágenes fascinantes de este fenómeno natural e incluso algunos de ellos son captados asando bombones o salchichas.

Esto parece ser una actividad peligrosa, pues las cámaras en vivo de la televisión pública RÙV muestran incendios en superficie en el valle de Meradalur, detrás del volcán Fagradalsfjall, sin embargo al ser una erupción de baja intensidad, las autoridades permiten que las personas se acerquen con la precaución necesaria.

Erupción es de baja intensidad y no representa peligro

La Oficina Meteorológica de Islandia, señala que esta erupción es de poca intensidad y las columnas de magma no superan probablemente los 50 metros de altura.

Sin embargo, un helicóptero con un equipo de científicos ha sido enviado a la zona para estudiar la situación, mientras las autoridades han pedido a los ciudadanos que acercarse con precaución y pueden mejor evitarlo.

El lugar de la erupción es el mismo donde hace un año se produjo otro episodio similar de unos seis meses de duración, sin que se produjeran daños significativos y que se convirtió en un fenómeno turístico.