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Azotan recortes a Comar e INM

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El reto de contener la oleada migratoria procedente de Centroamérica llega al Instituto Nacional de Migración (INM) y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) al mismo tiempo que un recorte importante en recursos económicos y de personal.

AGENCIAS/EL EDÉN MX

De acuerdo con lo presupuestado para este año, el INM ejercerá mil 330.6 millones de pesos, una cifra inferior en 23.1 por ciento a los mil 731.8 millones de pesos erogados el año pasado.

La Comar también fue víctima de la llamada austeridad republicana, pues para este año le fueron asignados 20.8 millones de pesos, un presupuesto menor en 19.1 por ciento a lo ejercido en 2018, que sumó 25.7 millones de pesos.

A cambio de que la administración del Presidente Donald Trump no impusiera un arancel progresivo a las exportaciones mexicanas a Estados Unidos, el Gobierno de México prometió detener la avalancha migratoria.

Tanto el INM como la Comar son las instituciones mexicanas que tienen que lidiar directamente con este fenómeno, tanto en el registro, canalización y costo de la estancia de los migrantes, como en la tramitación de asilo que formulan los centroamericanos.

Sin embargo, al recorte presupuestal se suma la disminución de plazas: el INM registró al 31 de mayo un recorte de 720 plazas, que representan el 12.5 por ciento de las 5 mil 720 plazas que le fueron autorizadas en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019.

En el caso de la Comar, esta instancia ha sufrido el recorte de 10 plazas, al disminuir su plantilla de 48 a 38 funcionarios, una reducción equivalente al 20.8 por ciento.

La oleada migratoria de la que se quejó la administración Trump se ve reflejada en el número de personas que han sido remitidas ante el INM, que de enero a abril de este año sumaron 51 mil 607, una cifra superior en 17.1 por ciento a los 44 mil 062 migrantes detenidos en el mismo periodo del año pasado.