LÍNEA POLÍTICA 02/02/21
Alberto Peregrino
AFLORA CORRUPCIÓN EN TABASCO
Todo un escándalo se suscitó el pasado fin de semana respecto a la podredumbre que se dejó ver en el gobierno de la 4T, encabezado en Tabasco por Adán Augusto López Hernández. Los involucrados en el tema son el Instituto de Seguridad Social del Estado de Tabasco (ISSET) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Y es que en base a un trabajo periodístico llevado a cabo por Carlos Loret de Mola en la televisora Latinus, se dio a conocer que entre abril y marzo del año pasado, el ISSET cuyo director general es Fernando Enrique Mayans Canabal, le entregó a la empresa CM del Golfo siete contratos con un monto de 48 millones de pesos.
El monto fue pagado por la compra de 90 mil batas quirúrgicas, 57 mil cubrebocas, 12 mil overoles desechables, sábanas, guantes, caretas, termómetros y medicamentos. En fin, el gobierno de Tabasco y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se hicieron acreedores de material hospitalario, así como de medicinas por más de 110 millones de pesos.
Eso no es lo malo, sino lo que armó la polémica, fue porque realmente ese material se adquirió de una empresa constructora, la cual pertenece al primo de Juan Ferrer, el titular del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI) quien tendrá mucho qué explicar al respecto.
La investigación indica que José Rubén Ferrer del Río, propietario de la compañía CM del Golfo, ganó contratos sin que nadie la estorbara, es decir, dichos contratos fueron por adjudicación directa, por un monto de más de 110 millones de pesos en Tabasco que, dicho sea de paso, es la tierra natal del presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Es evidente que los negocios sucios no iniciaron ahora, sino que, desde el mes de abril del año pasado, José Rubén Ferrer del Río dio inicio con la venta de equipos médicos al gobierno tabasqueño y al IMSS, siendo que su empresa constructora CM del Golfo ya tenía previamente firmado los contratos para obras hidráulicas y viales en calles de la capital del estado.
Loret de Mola en su interesante investigación, reveló que el gobierno de Tabasco y Ferrer del Río, cuentan con al menos 12 contratos sin testigo alguno. Es evidente pues, que todo se ha hecho bajo la mesa y al amparo de la oscuridad para que nadie se enterara de las reprobables acciones pero que dejan millonarias ganancias.
Aunque el gobernador tabasqueño asegura que el periodista miente y que solo lo hace por resentimiento por no recibir beneficios económicos a como lo hacía con sus antecesores. Sin, embargo, dejó claro que, si el ISSET hizo las compras, ellos tienen personalidad jurídica, es decir, tampoco desmintió el que no sea cierto, por lo Fernando Mayans tiene mucho qué aclarar y pronto. Aunque es un hecho que el tema dará para más.
Lo que todo mundo cuestiona es, por qué comprarle material médico a una empresa que se dedica a la construcción como CM del Golfo que nunca antes había incursionado en ese ramo, nunca antes había comercializado equipo médico al IMSS, a ninguna otra institución de salud pública o privada, y mucho menos al gobierno de Tabasco.
La investigación destaca igualmente que el gobierno de Chiapas, cuyo gobernador es Rutilio Escandón, cuñado de Adán Augusto López Hernández, igualmente hizo pagos por el orden de los 50 millones de pesos por hacer compras similares a los entregados al ISSET en Tabasco, solo que todo fue en sobreprecio. Así las cosas.
Línea de entrada
Y le cuento que la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, se ha visto evasiva y ha mostrado completamente su apatía con los reporteros que cubren las mañaneras, cuento éstos hacen preguntas relacionadas con la pandemia y el seguimiento de las acciones a seguir, sin embargo, contrario a ello, sí habló de la salud del Presidente, Andrés Manuel López Obrador, de quien dijo está mejorando rápidamente al grado que en breve se estaría reincorporando a sus actividades como mandatario de la nación. Sin duda alguna que cuando le conviene hablar del tema lo hace, o por lo menos siguió las indicaciones propiamente del presidente.
Línea de salida
Y siguen resurgiendo los cadáveres políticos. En Tabasco nadie duda de la inteligencia y habilidad política de Oscar Cantón Zetina, pero también todo mundo es conocer de la ola de traiciones en los que ha sobresalido con el mero afán de ocupar cargos públicos y estar en la nómina del gobierno. Y es que fue del PRI, PRD, PVEM y ahora de Morena. Vaya tipo, al igual que José Antonio de la Vega Asmitia, actual secretario de gobierno de Adán Augusto López Hernández, practica la política del chango. El servilismo puro se hace presente, de ahí que lo premian designándolo delegado de la tercera circunscripción federal en los estados de Campeche, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán. Ahora sin el menor escrúpulo alguno y el cinismo puro, se dice comprometido hasta la ’médula’ con el proyecto de López Obrador a quien siempre intentó derrocar. Lo vividor y lame botas jamás se lo podrá borrar, aunque se lo raspe. Qué asco. Por hoy es todo, nos leemos en la próxima Dios mediante.
