Un niño de siete años, identificado como Dante G., sufrió quemaduras de tercer grado en el 40 por ciento de su cuerpo al intentar replicar el reto viral “Fire Challenge”, que consiste en rociarse alcohol y prenderse fuego mientras se graba en video.
El hecho ocurrió la semana pasada en la colonia Amapola de Mérida. Inicialmente, el padre del menor aseguró que las lesiones habían sido provocadas por un accidente con un encendedor cerca de un motor de gasolina, pero después confirmó que su hijo trató de realizar el reto difundido en redes sociales.
Con el apoyo de la Fundación Michou y Mau IAP y en coordinación con el Gobierno del Estado, Dante fue trasladado al Shriners Children’s Hospital en Galveston, Texas, especializado en la atención de quemaduras graves.