El Gobierno de Bolivia emitió este miércoles una declaratoria de alerta epidemiológica como medida preventiva ante un posible incremento de casos de influenza A H3N2, incluida la variante K, la cual hasta el momento no ha sido identificada en el país. La acción busca evitar una eventual saturación del sistema sanitario nacional.
En conferencia de prensa ofrecida en la Casa de Gobierno, la ministra de Salud, Marcela Flores, explicó que la decisión forma parte de una estrategia de prevención anticipada. “La alerta sanitaria responde a una estrategia que en epidemiología se denomina de gestión de riesgo proactivo. No esperamos a tener una crisis sanitaria, sino que nos anticipamos ante cualquier situación”, señaló.
La funcionaria detalló que la declaratoria permitirá reforzar la vigilancia epidemiológica y capacitar al personal de salud para identificar oportunamente los síntomas asociados a esta patología, además de priorizar la atención médica a los grupos más vulnerables, entre ellos niños, adultos mayores y personas con enfermedades de base.
Las autoridades sanitarias reiteraron el llamado a la población a mantener medidas de prevención, acudir a los centros de salud ante la presencia de síntomas respiratorios y atender las recomendaciones oficiales, con el objetivo de reducir riesgos y proteger la salud pública.